Muerte Súbita. Causas de Muerte Súbita

Muerte Súbita

La mayor parte de las Muertes Súbitas naturales se deben a un fallo cardiaco.

La definición de Muerte Súbita aceptada en la actualidad es la de muerte natural que va precedida de una pérdida de consciencia brusca y que se produce en el plazo de una hora tras el comienzo de los síntomas en un individuo aparentemente sano, o que presenta una enfermedad (casi siempre cardiaca) pero que el tiempo y forma de muerte son inesperados, aunque esta se retrase por métodos artificiales.

El máximo nivel de incidencia de Muerte Súbita se produce entre el nacimiento y los seis meses de edad. La incidencia disminuye después de forma brusca y se eleva denuevo para alcanzar otro máximo entre los 45 y los 75 años. Posteriormente va a ir aumentando a medida que se envejece.

Los trastornos cardiacos son la causa más frecuente de Muerte Súbita natural.

Por esta causa concreta la incidencia es del 30 % entre los 14 y 21 años de edad y un 88 % en los ancianos.

En edades tempranas generalmente es en pacientes que padecen alguna cardiopatía congénita.

De las causas cardiológicas el infarto de miocardio es el que ocupa el primer lugar.

En general los varones presentan mayor incidencia que las mujeres hasta los 65 años. A partir de esa edad las cifras se van aproximando.

Causas de Muerte Súbita

Causas cardiacas.  Las más frecuentes son las que se exponen a continuación.

– Alteraciones de las arterias coronarias.

Obstrucción de esas arterias por arteriosclerosis.

Lesiones agudas por rotura de placas de ateroma o por tromboembolismos.

Alteraciones en la arteria aorta que va a dejar sin riego a las coronarias.

– Infarto de miocardio.

Cardiopatía isquémica crónica.

Infarto agudo.

– Hipertrofia del miocardio.

Secundaria a otras enfermedades cardíacas.

Miocardiopatía hipertrófica obstructiva o no obstructiva.

– Miocardiopatía dilatada o infiltrada.

– Miocarditis.

– Enfermedades de  las válvulas cardiacas.

– Alteraciones electrofisiológicas

Porque las vías de conducción son anómalas.

Por enfermedades del sistema de conducción.

Otros factores de riesgo de Muerte Súbita

– Isquemia transitoria por:

Pérdida de sustratos energéticos.

Generación de sustancias nocivas

– Estado de bajo gasto cardiaco:

Insuficiencia cardiaca crónica o aguda descompensada.

Shock hipovolémico.

– Alteraciones metabólicas generales:

Alteraciones electrolíticas.

Hipoxemia y acidosis.

– Alteraciones neurofisiológicas:

Alteraciones del sistema nervioso autónomo.

Alteración de función de los receptores.

Síndrome congénito de QT largo.

– Problemas tóxicos:

Efectos sobre el ritmo cardiaco de algunos fármacos.

Toxinas cardiacas.

Factores de riesgo cardiovascular que pueden dar lugar de manera indirecta a Muerte Súbita

Como ya se conoce, estos factores son fundamentalmente:

Diabetes.

Hipertensión. Hipercolesterolemia.

Tabaquismo.

Edad.

Estos factores hacen que el sistema cardiovascular enferme, lo que a su vez puede provocar paro cardiaco y Muerte Súbita.

Tratamiento del Paro Cardiaco

El tratamiento del paro cardiaco se ha de llevar a cabo en cinco fases:

1/ Respuesta inicial.

Confirmar si es una parada cardiaca comprobando si no hay pulsos ni movimientos respiratorios.

Verificar si hay o no una aspiración de cuerpo extraño en las vías respiratorias.

Se debe mantener la vía respiratoria del paciente despejada.

Se inclina la cabeza hacia a tras.

Confirma que no hay obstrucción porque la lengua se haya ido hacia atrás.

Hay que extraer las dentaduras postizas.

2/ Soporte vital básico.

Incluye mantener la respiración mediante un boca a boca, si no se dispone de un equipo específico, y compresión torácica. Se han de realizar 30 compresiones rápidas por cada respiración boca a boca.

La técnica es colocar la palma de una mano sobre la parte inferior del esternón y la parte inferior de la otra mano sobre el dorso de la mano apoyada para hacer fuerza suficiente para bajar el esternón de 3 a 5 centímetros.

Aplicar un desfibrilador si se dispone de él.

3/ Soporte vital avanzado.

Se hace a base de intubación con tubo endotraqueal, desfibrilación, cardioversión y colocación de un marcapasos. Oxigenación, inserción de vía intravenosa y la medicación adecuada en cada caso.

4/ Cuidados tras la reanimación.

Estos cuidados son diferentes dependiendo de la patología que haya provocado la parada cardiaca.

5/ Cuidados posteriores tras sobrevivir a un paro cardiaco extrahospitalario.

Así mismo, estos cuidados van a depender de la enfermedad que haya producido el paro cardíaco.

.

El Tema:  Muerte Súbita. Causas de Muerte Súbita,  ha sido revisado, elaborado y resumido, por la Dra María Julia Romero Martín,  Especialista en Medicina Interna y Neurología,    para publicar en:  www.tumedicoaltelefono.es