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02
Ene

Síndrome de Fatiga Crónica

Diagnóstico del Síndrome de Fatiga Crónica.

Un comité de expertos esbozó en 1994 una serie de Criterios Diagnósticos que evitaran la confusión respecto a esta enfermedad.

En resumen son los siguientes:

a) Padecer una fatiga crónica física y mental grave, que antes no existía, con disminución de un 50% de la capacidad laboral, social y personal, durante más de seis meses y que no puede ser atribuida a ninguna enfermedad conocida.

b) Tener cuatro o más de los siguientes síntomas.

Deterioro de concentración y memoria.

Faringitis o amigdalitis.

Nódulos linfáticos sensibles.

Mialgias y artralgias múltiples sin inflamación.

Cefalea distinta a las padecidas anteriormente.

Alteración del sueño.

Malestar que dura más de 24 horas después de un esfuerzo no intenso.

Todos ellos con duración de más de seis meses y aparición del resto de los síntomas después de la fatiga.

c) Son criterios de exclusión:

Enfermedad que justifique la fatiga.

Trastorno depresivo mayor y trastorno bipolar.

Esquizofrenia.

Demencia.

Anorexia nerviosa.

Bulimia.

Enfermedades autoinmunes activas (SIDA).

Alcoholismo y abuso de sustancias.

Obesidad grave.

Criterios Canadienses

En 2003 un nuevo grupo de expertos definió unos nuevos criterios diagnósticos.

Una persona con Síndrome de Fatiga Crónica debe reunir los siguientes criterios:

1) Cansancio o agotamiento extremo que reduce ostensiblemente su actividad habitual.

2) Malestar o cansancio desproporcionado después de un esfuerzo que tarda en recuperarse más de 24 horas.

3) Trastornos del sueño, del ritmo, del tiempo, poco reparador, etc.

4) Mialgias. Dolores articulares y musculares difusos y migratorios. Cefaleas de características diferentes a las habituales.

5) Dos o mas de los siguientes trastornos neurocognitivos:

Confusión.

Desorientación.

Falta de concentración y atención.

Falta de memoria a corto plazo.

Trastornos en el lenguaje y en el procesamiento de la información.

Inestabilidad.

Ataxia.

Fotofobia.

Hipersensibilidad a los ruidos.

Situación de sobrecarga emocional.

6) Por lo menos un síntoma de los siguientes:

Neurovegetativos.

Trastornos intestinales, urinarios.

Respiratorios, palpitaciones, arritmias.

Inmunológicos:

Dolor de garganta, inflamación de ganglios.

Alergias nuevas o aumento de las ya existentes

Estados gripales recurrentes.

Hipersensibilidad a sustancias químicas y medicamentosas.

Neuroendocrinos:

Intolerancia al frío o al calor.

Falta de apetito.

Intolerancia al estrés.

Hipoglucemia).

7) La enfermedad persiste al menos 6 meses.

Para el diagnóstico de la enfermedad, además de estos criterios, hay que realizar previamente todo tipo de pruebas diagnósticas (analíticas, pruebas de imagen, etc) para descartar la existencia de otra enfermedad.

Diagnóstico Diferencial de Síndrome de Fatiga Crónica.

Hay enfermedades que presentan muchos síntomas que son similares a los del Síndrome de Fatiga Crónica y a esas enfermedades hay que diferenciarlas de este Síndrome.

Las que se pueden confundir con mayor facilidad son las que se describen a continuación:

Hipo e hipertiroidismo. Tanto la falta como el exceso de hormona tiroidea pueden dar cansancio excesivo.

Cánceres en fases avanzadas también suelen  presentar fatiga intensa

La Enfermedad de Addison.

Las Tiroiditis autoinmune.

El Síndrome de Cushing.

Algunas anemias. En casi todas las anemias el síntoma común es el cansancio de quienes la padecen

La Diabetes mal controlada.

Abuso de alcohol y de otras sustancias que a la larga van causando deterioro físico importante de quienes las consumen.

Trastornos del sueño como la Apnea del Sueño. Estos son pacientes que como no descansan bien porque carecen de un sueño reparador, suelen quejarse de fatiga y somnolencia diurnas.

Algunas enfermedades psiquiátricas, como la depresión puede manifestarse por cansancio físico inexplicable y que no mejora con el paso del tiempo.

Enfermedades infecciosas e inmunológicas como SIDA, hepatitis, tuberculosis, etc. Estas son enfermedades que a medida que van progresando pueden dar lugar a un gran deterioro del paciente que se queja de enorme fatiga

Polimialgia reumática. También sus síntomas característicos son dolor y cansancio muscular.

En algunas enfermedades neurológicas, como la esclerosis múltiple, miastenia grave o Parkinson, cuando los síntomas neurológicos aún no están muy definidos, el paciente puede quejarse de falta de fuerza progresiva y molestias musculares.

la Artritis reumatoide o el Lupus eritematoso sistémico son enfermedades autoinmunes que a lo largo de su evolución pueden dar además de dolores musculares, fatiga intensa.

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El Tema: Síndrome de Fatiga Crónica, ha sido revisado, elaborado y resumido por la Dra María Julia Romero Martín, Especialista en Medicina Interna y Neurología, para publicar en:  www.tumedicoaltelefono.es

 

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