Sudor. Sudoración

Sudor. Sudoración

La Sudoración, llamada también Transpiración, consiste en la liberación de un líquido salado por parte de las glándulas sudoríparas del cuerpo, que están situadas en la epidermis.

La Sudoración es una función esencial que ayuda al organismo a permanecer fresco, es decir, regula la temperatura y su función es la de refrigeración corporal.

El Sudor al evaporarse absorbe calor con lo que la piel se enfría, aunque también tiene otras funciones, como proteger e hidratar la piel.

Una persona nace con 2-4 millones de glándulas sudoríparas. Se suda más cuantas más glándulas sudoríparas tenga en su piel.

Las mujeres tienen mayor número de glándulas sudoríparas que los hombres, pero en ellos son más activas.

La Sudoración normal en una persona es de aproximadamente medio litro al día.

La cantidad de sudor aumenta con el calor, la actividad física, la fiebre, estrés, angustia o ansiedad,  miedo o vergüenza. También puede ser síntoma de menopausia en las mujeres.

Se conoce como Hiperhidrosis a una sudoración excesiva. Muchas personas que la sufren ven alterada su calidad de vida, ya que la transpiración se presenta en cualquier momento, independientemente de la temperatura, y no se tiene control sobre ella.

Se piensa que en algunos casos es hereditaria.

Se distinguen dos tipos de Hiperhidrosis: primaria y secundaria.

La Hiperhidrosis primaria puede iniciarse en cualquier momento de la vida, sin aparente causa desencadenante.

La Hiperhidrosis secundaria puede ser debida a menopausia, a ciertos fármacos, a alteración de la glándula tiroidea, a tumores o a Diabetes Mellitus.

Según las regiones del cuerpo afectadas por la Hiperhidrosis, hay sudoración palmar, sudoración plantar, sudoración axilar y sudoración facial. Esta última se acompaña a veces de rubor o enrojecimiento del rostro.

Las causas generales de la Sudoración son:

Hiperhidrosis esencial (no se conoce la causa).

Situaciones emocionales estresantes.

Comidas fuertes y muy condimentadas.

Eliminación de temperatura externa (calor ambiental) o interna (fiebre).

Hipoglucemia (bajada de azúcar en sangre).

Menopausia.

Algunos medicamentos, como psicóticos, hormona tiroidea, antitérmicos o morfina.

Ejercicio excesivo.

Algunos cánceres (leucemias).

Alcohol. Cafeína.

Deprivación de alcohol y narcóticos.

Hiperhidrosis y Calidad de Vida

La Hiperhidrosis empeora la calidad de vida de quienes la padecen.

Puede dar lugar a estrés emocional que a su vez aumenta la Hiperhidrosis.

Dificulta la vida personal y la actividad laboral de quien la padece, como manipulación de papeles, de equipos electrónicos,  de herramientas finas etc. Incluso hay personas que evitan el saludo de manos.

Tratamiento.

Se han de adoptar Medidas generales tales como tomar agua para reponer líquidos, reducir la temperatura ambiente, o lavarse las zonas sudorosas.

Se utiliza Solución de Cloruro de Aluminio (hexahidratado) como antitranspirante, que resulta efectivo solo en la zona axilar.

Toxina botulínica tipo A que se inyecta en las glándulas sudoríparas y bloquea su funcionamiento.

Iontoforesis. Consiste en una técnica de tratamiento, realizada por médicos especialistas, que consiste en hacer pasar una corriente eléctrica de bajo voltaje por agua o almohadillas húmedas, lo que coagula las proteínas superficiales de la piel que bloquean parcialmente los conductos sudoríparos.

Fármacos orales, como Robinul, Ditropan o Dixavit, pueden ayudar a combatir la sudoración con mayor o menor éxito.

El Tema: Sudor. Sudoración, ha sido revisado, elaborado y resumido por la Dra. María Julia Romero Martín, Especialista en Medicina Interna, para publicar en: www.tumedicoaltelefono.es